Cumpleaños Feliz.
Amigo mío, ¿Cómo puedo describir lo que he aprendido de ti todos estos años? ¿Cómo responder de forma adecuada a la riqueza de pensar de forma diferente, de aprender a sentir de forma distinta, de valorar cosas que por mi mismo hubiese sido incapaz de valorar? ¿Qué regalarte en la medida que me has regalado? ¿Cómo llegar a premiar el recorrido de amistad a lo largo de treinta años? ¿Cómo voy a ser capaz de agradecer tus silencios en los momentos de angustia y el placer de compartir mis alegrías cuando la vida me ha sonreído? Eres tú, en el día de tu cumpleaños, quien nos hace a los que te queremos un gran regalo. Porque es Dios, con tu nacimiento, el que ha repartido entre nosotros el don y el privilegio, indispensable para mi, de hacer camino a tu lado. Un fuerte abrazo, querido amigo.