Perfecto.


Me he quedado sentado en el porche de mis sueños, balanceándome en el columpio de madera, mientras violines de agua repicaban sus notas en las escaleras. Le he pedido a Dios que me concediese el favor de que ese momento fuese perfecto. Y mientras esperaba Su respuesta, has pasado tú corriendo bajo la lluvia, empapada de vida.

Por un momento perfecto, me he quedado sentado en el porche de mis sueños.

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Comentarios

Schwan ha dicho que…
Desde el porche y por ése momento perfecto todo fue como debería ser: qué bonito y qué suerte disfrutar de un momento así.
10:46 a. m.
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