Ya que está leyendo la introducción, le diré que éste pequeño espacio de palabras lo reservo para mis filias, fobias y manías, naturalmente. Pase y lea, es usted bien recibido.
Razonamiento Teológico.
Obtener enlace
Facebook
X
Pinterest
Correo electrónico
Otras aplicaciones
Miguel, -5 años-, con sus ojos azules exigiendo respuestas..
Papá, si Dios con una palabra suya puede salvarnos.. ¿Qué pasará cuando nos diga una frase enterita?
Yo no sé lo que sueñan los ciegos. Encadenados a la retina de lo invisible, deletrean impávidos el repicar de la lluvia en las ventanas. Les siento como almas de días enteros, agotados de sombras: miden su tiempo en los ecos sonoros de la palabra. Es jazmín de jardín, es goce de roce, es infinito matiz de sabor. Sonidos que arrullan sentidos. Y juegan entre ellos a definir la realidad, solapándose, acompasando la noche perpetua en imágenes imposibles.
Últimamente tengo el alma de visita en el extranjero. La he expedido el pasaporte y ya no sé dónde para; probablemente en el oasis de algún remoto desierto, o en la espuma de las olas, allí donde el mar acaba, y se escucha aullar el viento. La he imaginado en una ciudad atravesada de canales secretos: solitarios meandros de lluvia por los que pasea en su barca, empapada hasta los huesos. Campanarios sin campanas, majestuosos palacios sin dueño; calles y plazas vacías donde solo habita la nostalgia, como un vago recuerdo. Una ciudad sin nadie dentro. No, allí no puede estar mi alma, olvidada y rota, escindida de la ciudad de mi cuerpo. He de comunicarme con ella, aunque lleve lejos demasiado tiempo. Antes su rostro coincidía: no era la imagen borrosa que ahora me mira en el espejo. Últimamente tengo el alma de visita en el extranjero. no sé si está de vacaciones, o yo, estúpido de mi, la condené al destierro.
Genial el vídeo que me han mandado unos amigos a través de e-mail.Los que estamos en la situación que describe el contenido del vídeo tampoco entendemos nada. A ver qué os parece.
Comentarios
Sinceramente, no doy a alcanzar lo que pensará Dios, pero me puedo hacer una idea ante las cafradas que cometemos aquí abajo...