El corazón.
Nacho, 4 años recién cumpliditos, observa cómo mi mujer (médico) ausculta el pecho de su hermano pequeño con el fonendo. ¡Mamá, yo también quiero!
-Bien, Nacho, escucha...
- Uiiii, halaaaaa...
Se queda pensativo un momento, y lanza la pregunta:
- Mamá, ¿Donde está Jesús?
No puedes acostumbrarte a las preguntas de los niños. Como te descolocan, sabes que has de preguntar tú para seguir el hilo de sus pensamientos.
-¿Y esa pregunta, hijo?
- ¿En qué parte del corazón de mi hermano está? Porque Jesús está en todos los corazones, ¿verdad, mamá?
Comentarios
Esas preguntas a quemarropa, súbitas, que te pillan con la guardia baja y que desvelan la profundidad del pensamiento y de los sentimientos.
Como dice Ángel "ellos captan la sencillez, la verdad, la pureza de las cosas como nadie".
Saludos.
Gloria al Señor por nuestros hijos. Son una pasada.
Besos.